martes, 26 de febrero de 2013

Foraster@s por Escuernavacas

Con esta entrada queremos inaugurar la nueva sección del blog Foraster@s por Escuernavacas en la que queremos que los forasteros nos cuenten cómo ven el pueblo, cómo lo viven.

Lo inauguramos con una forastera que prefiere no dar su nombre, aunque el artículo lo ha escrito con mucho cariño hacia su familia política y todo el pueblo.

Esperamos que os guste y más foraster@s se animen a dejar aquí su experiencia.



El Club de la Comedia en Escuernavacas

Comedia, come de día y come de noche, eso es lo que haces si te pasas un fin de semana en Escuerna. Llega la hora de comer y hay tres primeros y tres segundos para elegir supuestamente, pero tienes a tu suegra como la voz de la conciencia diciendo "pero come muchacha" y tú con la boca llena "si si si ya como".
Y después de eso siempre se le ocurre a alguien decir:
- "pero saca la cuba*, no ?"  y luego vienen las viandas, el postre, el café con pastas, que en la bodega hay pastas a "templón".
El caso es que a punto de que te de un cólico te pones a recoger la mesa y preguntas: "¿dónde guardo esto?" y te contestas: "pues eso se defiende mejor en la nevera" y tú te imaginas a unos restos de comida en su tupper defendiendose del enemigo.
Pero lo peor es el primer día que vas a comer, con la vergüenza típica del primer día y te dicen:
"pero apártate muchacha" y tú te apartas como diciendo pero si molesto o que pasa y resulta que lo que quieren decir es que te sirvas la comida.
Pero lo que más me llama la atención de Escuernavacas es la adoración por el TeleClub.
Llegas al pueblo, saludas a la familia y escuchas: "me bajo al tele, ¿te vienes?"
Yo creo que es algo genético porque hasta l@s niñ@s de tres años dicen "me bajo al tele".
El caso es que a veces preguntas, "¿pero para que vas al tele si está cerrado?",
"bueno, da igual, tenemos llaves"
En fin, si no tienes sangre de Escuerna no llegas a comprenderlo.
Es que Escuernavacas tiene un dialecto propio que vas aprendiendo con los años:
que te pasas el día gay gay (y tu pensando que hablan de gays) en vez de bla bla bla.
Se ponen entrequedentes, se añusgan, son alabancos, bobines, galanes, se alomban, se ponen cabezos, se amulan ...

En fin, son peculiares, pero te acogen desde el primer día como si fueras uno de ellos y nunca jamás te sientes como un forastero.


* plato con embutido


7 comentarios:

  1. Ahí va una anécdota que viví hace años con una chica de Escuerna:
    Estaba la susodicha escornavaquense (cúal es el gentilicio?) comiendo altramuces (imagino que sería entorno al día del padre, que es típico ¿no?) y después de un rato se huele los dedos y dice: ¡CÓMO ME HUELEN LAS MANOS A CHOCHO!!! Os aseguro que algo así sólo te pasa con alguien tan genuino como los de Escuernavacas. Besos

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  2. Muy bueno! Me encanta!! Esta sección promete!

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  3. venga los forasteros animaros a mandar vuestra imagen de escuerna!!!

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  4. muy buena la entrada!!!y hay que darle la razón a la escritora, en escuerna comer se come! y la pasión por el tele es indudable!!!
    saludos

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  5. me encanta!!! creo que refleja muy bien algunas cosas del pueblo, que esta escrito con mucho cariño y es muy divertido, muchas gracias a la forastera que lo ha escrito...

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  6. yo también quiero agradecerle a la forastera su relato, es genial.
    y quiero aprovechar para decir que escuernavacas es único por su gente.

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