jueves, 20 de mayo de 2010

Ganadería

Cuando compraron el pueblo entre 29 vecinos, lo dividieron en 29 partes, cada parte tenía dos cuartos, cuatro medios cuartos (ocho piernas).
La ganadería se tenía a razón de la propiedad, porque aunque se dividió en partes iguales, algunos vendieron parte de su compra y empezó la diferencia en la propiedad y por lo tanto, diferencia en la ganadería.
Para tener tantas o cuantas cabezas de ganado, había una tasa que equivalía a 8 cabezas de bovino, 50 cabezas de ovino, 8 de porcino y 1 de caballería para cada parte.

Con el ganado bovino se hacían los trabajos de la tierra, pues en todas las casas había vacas que sabían trabajar de todo, en algunas casas también había bueyes que eran más fuertes para el trabajo.
A todos los animales de la especie bovina cuando tenían dos años, se le enseñaba a trillar, puesto que era el trabajo más llevadero, para enseñarlos se uncía el domón (que así se llamaba al que se iba a enseñar) con una vaca que ya supiera y que tuviera fuerza para que lo dominara y lo enseñara.
Con más años, se les enseñaba a arar y después a los trabajos con el carro.

Todos los días del año había una boyá (todas las vacas del pueblo juntas).
Y había un vaquero a sueldo que cuidaba las vacas y los burros.
Se dejaba alguna vaca en casa para hacer algún trabajo, anteriormente no se tenían vacas lecheras.
La boyá se solía tener en la hoja que quedaba libre. Durante la primavera había dos boyás, una eran las vacas de trabajo que iban a comer a los valles de la hoja que estaba sembrada, la otra, el ganado pequeño, las llevaban al veranil (hoja segada el año antes y que no había que arar)

Las ovejas se juntaban en piaras, había 3 piaras (más o menos iguales), repartidas a razón de la propiedad. De ellas se hacían cargo 3 pastores a sueldo.
Las ovejas dormían en cortinas, cada noche en la cortina de un propietario, y por el día las sacaban a pastar.
Cuando alguna paría vendían el cordero; los hombres se juntaban para ordeñarlas y las mujeres para hacer el queso.
Se repartía la leche según las ovejas que se tuviesen.
De las ovejas también se aprovechaba el estiércol para abonar.

Los cerdos estaban en la hoja que se alzaba.
Dormían en pocilgas y cada uno cuidaba de sus cerdos, les iban a echar de comer por la mañana y por la tarde.

Cuando se hizo la división, cada uno se hizo cargo de su ganado.


Por José Vicente Sevillano

1 comentario:

  1. Algunos de los pastores que hubo fueron Laude y el Señor José Maria, cuando este se jubiló vino un chico joven que se llamaba ( y se sigue llamando) Julián. Dormían en "la casa del pastor", que es parte del actual teleclub, junto con el casillo donde se guarda la leña.Cada noche iban a cenar a la casa que le tocara...

    ResponderEliminar